Te ayudamos a elegir tu formación, pulsa aquí.
¿Te has preguntado por qué la vida implica tantos retos? Si tu respuesta es afirmativa, debes saber que en la vida hay matices que cada persona experimenta de formas diferentes, y por lo tanto el crecimiento humano se da en forma distinta en cada individuo.
Podemos afirmar entonces, que debemos pasar por distintas etapas para aprender y crecer como seres humanos. Sin embargo, no estamos hablando de una sucesión lineal de acontecimientos, ya que en la vida hay una serie de discontinuidades, es decir, de cambios repentinos, de nuevos retos y oportunidades que nos enseñan una lección.
Desde que crecemos hasta que morimos experimentamos una sucesión constante de cambios. Muchos denominan las cuatro etapas de la vida a esas fases de crecimiento personal que nos llevan a trascender espiritualmente.
Las cuatro etapas de la vida, son el ciclo vital de todo ser humano. Durante estas fases nuestros intereses van cambiando, a tal punto de despegarnos de lo material para trascender espiritualmente.
Las cuatro etapas de la vida, no tienen que ver entonces con los logros o con la edad, sino más bien con el desarrollo de nuestra madurez mental y espiritual. Ahora bien, para este célebre psiquiatra las etapas de la vida son:
Es la etapa en la que el ser humano es más egoísta, en donde lo más importante es la apariencia física. Esta fase es la representación de admiración hacia uno mismo, el atrevimiento y sobre todo el culto al cuerpo, es por ello que se considera la menos madura de todas.
En otras palabras, en esta etapa estamos obsesionados con nuestro aspecto físico y nuestra apariencia, tanto así que podemos pasar horas viéndonos a un espejo. También se valora la belleza y fuerza ajena como si fueran la clave del éxito. Muchas personas no salen de esta fase o pueden volver reiterativamente a ella, ya que no alcanzan los niveles de madurez necesarios para avanzar.
A medida que vamos madurando, vamos dejando poco a poco la obsesión por nuestra apariencia para centrarnos en otros intereses. En esta etapa comenzamos a adquirir responsabilidades y se desarrolla un deseo por conquistar el mundo, es decir, es cuando nos planteamos metas y hacemos todo lo posible para obtener lo mejor.
Se denomina Apolo, porque en esta fase queremos luchar como guerreros, nos alzamos en la búsqueda de nuevos logros para sentirnos bien. Sin embargo, seguimos siendo egoístas, porque queremos tener lo que tiene el otro, nos comparamos, buscamos derrotar a los que nos rodean para sentirnos mejor, buscamos lo mejor para nosotros mismos sin pensar en los demás, lo cual nos hace guerreros materialistas.
A medida de que la etapa de guerrero se va desvaneciendo, dejamos atrás el egoísmo y empezamos a pensar en los demás. Esta etapa se caracteriza por la sensación de carencia que experimentamos, al darnos cuenta que todo lo que hemos logrado no nos hace sentir completamente feliz y plenos.
Aquí nuestro enfoque cambia de rumbo, ya no buscamos lo mejor para nosotros, sino que nuestro objetivo es empezar a dar, y servir a los que están a nuestro alrededor. Nos damos cuenta que el dinero y todas las cosas materiales seguirán apareciendo en nuestra vida, pero no le damos el mismo valor que antes, porque empezamos a desapegarnos de todas ellas, debido a que entendemos que la vida no solo se trata de cosas materiales.
De acuerdo a las cuatro etapas de la vida según Carl, en esta fase dejamos el egoísmo, la egolatría y el egocentrismo un lado, porque dejamos de pensar en nosotros mismo y en maneras de recibir, por lo que nos enfocamos en dar y ayudar a los más necesitados. Entonces el arquetipo del sacerdote se hace presente, ya que dejamos de estar apegados a lo material para centrarnos más en lo emocional.
En cuarta y última fase de las cuatro etapas de la vida, nos damos cuenta que somos más de lo que pensábamos, es decir, que somos más que un cuerpo, más que nuestras posesiones, más que nuestras amistades y así sucesivamente hasta llegar a la conclusión de que somos seres divinos.
Esta es la última etapa del animus, donde buscamos dar un paso más allá, debido a que seguimos teniendo la sensación de carencia, de que nos falta algo. Nos damos cuenta que ayudar a otros, atender, dar, ofrecer e incluso amar no es suficiente, y por lo tanto deseamos algo más.
La búsqueda de aquello que nos hace falta nos lleva al plano espiritual, y es donde entendemos que ninguna de estas etapas representan quién o qué somos, es decir, nos damos cuenta que somos seres espirituales que vivimos una experiencia humana, y no al contrario. Esta etapa se caracteriza porque podemos salir de nuestra mente, estar fuera de nuestro cuerpo para poder comprender que somos realmente.
La teoría de las cuatro etapas de la vida, significan nuestra búsqueda interna, es decir, es el camino que seguimos para alcanzar nuestra autorrealización como seres humanos y seres espirituales. Todo esto sucede a medida que nos volvemos más humildes, y nos vamos despegando de todo lo material que se presenta en nuestra vida.
Estas cuatro etapas nos demuestran lo compleja que es la existencia humana y nos enseñan los distintos estadios por los que debemos pasar en el transcurso de nuestra vida para darnos cuenta que es lo que realmente queremos y quiénes somos, además de qué papel cumplimos en el entorno que nos rodea.
Lo importante de las cuatro etapas de la vida, es conocernos a nosotros mismos y despertar espiritualmente para alcanzar nuestra plenitud, y así ayudar a otros a alcanzar su felicidad.
Sin duda alguna, aprender un poco más sobre las cuatro etapas de la vida nos ayudará a que nuestro camino por esta vida, sea mucho más fácil para lograr el nivel espiritual máximo que nos guiará en nuestro encuentro con la divinidad y la felicidad.
La psicología es un área muy amplia, que abarca diversos temas del crecimiento personal, incluyendo las cuatro etapas de la vida. Esta ciencia ayuda a las personas a comprender cada estadio por el que pasa en su vida y a manejar sus emociones de acuerdo a una situación específica. Si bien es cierto, que no es lo único que trata esta materia, algunos de sus estudios están relacionados con estas fases de la vida, es decir, que ayudan a su comprensión.
Si deseas ampliar tus conocimientos sobre esta área, te invitamos a conocer todos nuestros ciclos educativos relacionados con la Psicología y el crecimiento personal, entre ellos te recomendamos el curso de Psicología Holística.
En Euroinnova Business School encontrarás un sinfín de ciclos académicos orientados al desarrollo intelectual y profesional de sus estudiantes. Le garantizamos calidad educativa y diversidad en nuestros cursos.
Nuestro portfolio se compone de cursos online, cursos homologados, baremables en oposiciones y formación superior de postgrado y máster
Ver oferta formativa